Durante los primeros meses de vida, el sueño no solo ayuda a crecer, también regula funciones vitales, refuerza el sistema inmunológico y favorece el vínculo con los cuidadores.
Por eso, es fundamental ofrecerle al bebé un entorno seguro, predecible y sereno para descansar. A continuación, te compartimos algunas recomendaciones clave para lograrlo:
Durante los primeros seis meses (e idealmente hasta el primer año), los pediatras recomiendan que el bebé duerma en la misma habitación que los padres, pero no en la misma cama.
Dormir en la cama con adultos puede parecer cómodo o práctico, pero implica riesgos como asfixia accidental, sobrecalentamiento o aplastamiento involuntario.
Lo ideal es que el bebé tenga su propio espacio para dormir, cerca de la cama de los padres, como las cunas para bebés o una cuna colecho, para poder atenderlo rápidamente, facilitar la lactancia nocturna y reforzar el vínculo afectivo.
El colecho seguro consiste en colocar la cuna del bebé al lado de la cama de los padres, con una barrera segura y una superficie firme. Este tipo de cuna colecho permite:
Atender al bebé fácilmente durante la noche sin moverse demasiado.
Mantener el ritmo de sueño de todos sin interrupciones bruscas.
Reducir el riesgo de muerte súbita del lactante (SIDS) hasta en un 50%, según estudios recientes.
Brindar una sensación de contención, calma y seguridad emocional.
Las cunas tipo colecho son ideales para quienes buscan cercanía con seguridad durante los primeros meses.
Temperatura estable: la habitación debe estar ventilada y no sobrecalentada.
Evitar exceso de abrigo: mejor optar por saquitos de dormir o mantas livianas.
Nada de humo o aromas fuertes: el humo del tabaco o perfumes intensos pueden afectar las vías respiratorias del bebé.
Luz tenue y poco estímulo visual: ideal para que el cuerpo del bebé entienda que es momento de descansar.
Las cunas para bebés deben estar ubicadas en un ambiente tranquilo y seguro para favorecer un descanso saludable.
Además del aspecto físico, dormir en su propia cuna ayuda al bebé a establecer una rutina, ganar autonomía de a poco y desarrollar hábitos de sueño saludables. Esto también prepara el camino para futuras transiciones: pasar a su habitación, dormir solo, etc.
Al crear una rutina constante —baño, alimento, silencio, cuna— el bebé comprende que llega el momento de descansar. Este tipo de estructura es clave para su seguridad emocional y para el descanso de toda la familia.
Existen soluciones prácticas y adaptadas a cada etapa del crecimiento. Cunas para bebés como la Next2Me Pop-Up o Next2Me Air, y opciones versátiles como el Baby Hug 5 en 1, fueron pensadas para facilitar la cercanía nocturna sin dejar de priorizar la seguridad y el bienestar del bebé.
Si buscás una cuna colecho, en Chicco Paraguay vas a encontrar modelos seguros, certificados y pensados para acompañarte desde el primer día.
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